Hubo que esperar cinco temporadas para ver de nuevo a Juan Martín Del Potro pisar la arena de Roland Garros. Desde los cuartos de final de 2012 (p. con Roger Federer en el quinto set), el argentino no saltaba a la tierra batida francesa y en su regreso lo hizo en el primer turno de la Pista 6 con una sólida victoria ante Guido Pella por 6-2, 6-1, 6-4 en una hora y 49 minutos.
El de Tandil, que arrancó este curso el pasado mes de febrero en Delray Beach, inauguró su participación en los Grand Slam en 2017. Y llega a París después de una gira sobre tierra batida en la que pudo firmar los cuartos de final en el ATP Masters 1000 de Roma (p. con Novak Djokovic) y con un récord de partidos de 11-6 este curso.
Este martes, Del Potro añadió su victoria número 12 del año a su casillero, mostrando una versión autoritaria ante un rival al que ya había derrotado en su único enfrentamiento previo en la primera ronda del ATP Masters 1000 de Miami de 2016. Mantuvo un elevado porcentaje con el servicio, anotándose el 81% de los primeros que puso en juego, además de sumar 13 saques directos.
Además el campeón del US Open 2009 se estrenó sin ceder una sola opción de break en todo el partido y amenazando el saque de su compatriota procedente de la fase previa hasta en 15 oportunidades. Del Potro convirtió 10 quiebres en todo el choque para cerrar el debut más cómodo en cuanto a resultado desde 2009, cuando también entregó únicamente siete juegos (d. a Michael Llodra).
El argentino, que terminó con 33 golpes ganadores, se enfrentará al español Nicolás Almagro quien superó al chipriota Marcos Baghdatis por 6-7(3) 6-4 6-3 7-6(1)
ATP
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