sábado, 31 de enero de 2015

Bolelli y Fognini campeones de dobles en el Abierto de Australia

Simone Bolelli y Fabio Fognini capturaron su primer título de Grand Slam de dobles el sábado en el Abierto de Australia.



La pareja italiana, que jugaban su noveno major juntos, derrotaron al equipo francés formado por Pierre-Hugues Herbert y Nicolas Mahut 6-4, 6-4 en la final.

Son la primera pareja italiana en ganar un título de dobles de Grand Slam desde que Nicola Pietrangeli y Orlando Sirola levantasen la corona de Roland Garros en 1959.

El triunfo de Bolelli y Fognini en el Abierto de Australia es su tercer trofeo juntos, además de Umag 2011 (v. a Cilic-Zovko) y Buenos Aires 2013 (Monroe-Stadler).

Herbert sufrió la rotura de su saque en dos ocasiones en el set inaugural de 41 minutos, lo cual fue decisivo. Bolelli y Fognini cometieron cinco errores forzados menos, mientras los franceses consiguieron tan solo capitalizar uno de sus cinco oportunidades de break.

Los italianos pusieron de nuevo presión en el servicio de Herbert nada más empezar el segundo set. Con 1-1, Herbert salvó dos puntos de break con 15/40 mostrando una gran confianza. Con 5-4, Fognini aprovechó la oportunidad con resto de derechas a los pies de Mahut, cuando sacaba con 30/40. Bolelli selló con tranquilidad la mayor victoria de sus carreras.

Herbert y Mahut, que lograron 23 ganadores, intentaban convertirse en la primera pareja francesa en ganar el Abierto de Australia desde Michael Llodra y Fabrice Santoro en 2004. Antes del campeonato, la pareja nunca había ganado un encuentro al nivel del tour.

ATP

Serena implacable, vence a Sharapova y se queda con título de Australia

MELBOURNE -- Serena Williams superó a Maria Sharapova por 6-3 y 7-6 (5) y se coronó por sexta vez en el Abierto de Australia. En el global, alcanzó su 19° título de Grand Slam, tomando distancia de Martina Navratilova y Chris Evert (18), para quedar a solo tres de Steffi Graf (22), entre las más ganadoras de la Era Abierta.



Serena comenzó el encuentro buscando imponer su potencia desde la primera pelota, presionando con la devolución y llevándose un rápido quiebre de ventaja para 2-0.
En 3-2 y 30-30, la N°1 mostró su desencanto cuando la lluvia irrumpió en el Rod Laver Arena y forzó una pausa de 10 minutos para cerrar el techo.

Apremiada y en frío, Serena hizo caso omiso a cualquier preocupación: ace, tiro ganador y 4-2. En suma, en el game siguiente quebraría en cero a una Sharapova que otra vez se mostraba irregular en el (re)inicio.

La única laguna de la estadounidense en el partido tuvo lugar sirviendo para set en 5-2. En su peor game en el encuentro, la N°1 regaló su único quiebre de la noche con una doble falta y le dio algo más de suspenso al primer capítulo. Poco suspenso, en realidad. Porque cuatro pelotas después volvía a romper en cero el servicio de la rusa y facturaba la diferencia.

Hasta allí era todo de Serena. 11 tiros ganadores contra solo tres de Sharapova, números parejos en errores no forzados, pero una clara diferencia al servicio, con la N°1 obteniendo puntos gratis en situaciones complicadas y la rusa dependiendo mucho de su primer golpe.

En el segundo parcial, Sharapova asumió una actitud mucho más agresiva, aun teniendo que ganar dos o tres veces los puntos ante una Serena que desde su fuerza de brazos devolvía todo desde la base. Además, la rusa empezó a encontrar respuestas con el saque abierto y desde allí comenzó a diversificar la búsqueda.
En efecto, Sharapova volvió a iniciar el set en apuros, 0-1 y 15-40. Pero sacó de la manga dos de sus cinco aces en el partido para mantener la paridad.

Del otro lado, Serena llevaba esa versión al extremo: 0-30 en 2-2 y 3-3, combinó cinco aces (totalizó 18) y otros tantos saques ganadores para desarticular a una rival que nunca pudo leerle el servicio. Más de una vez, incluso, Sharapova se la jugó a uno u otro costado para recibir en una mejor posición, pero siempre quedó del lado equivocado.

Antes de llegar al tiebreak, Serena tuvo su primer punto para campeonato en 5-4, pero una enorme derecha de Sharapova evitó la temprana conquista.

Ya en el desempate, pequeño catálogo de jerarquía de la N°1 y rápida diferencia para 4-1. Pero de lo mejor a lo peor: dos errores no forzados para 4-3 y nueva secuencia llegando a 5-4, sin miniquiebres.

Con el saque de la rusa, otro paso al frente de Serena y ventaja de 6-4. Doble match point. El primero, como el anterior: todo mérito de Sharapova (que pasó de tres winners en el set inicial a 18 en el segundo).

Ya con Serena al servicio, un cierre a tono: servicio abierto, ace, raqueta al piso y sonrisa... a medias. La bola tocó red, se repite el punto. Cero problema para la N°1: mismo saque potente, al mismo lugar, ace y, ahora sí, toda la gloria en sus manos.

Con su 19ª corona, entonces, la norteamericana quedó 19-4 en finales de Grand Slam, llegando además a 65 títulos en su carrera. Como agregado, estirará a alrededor de 1500 puntos la ventaja sobre la rusa en el ranking de la WTA.

"Felicitaciones por seguir escribiendo historia", la elogió Sharapova post partido en un sentido discurso en cancha. La rusa queda ahora con 16 derrotas consecutivas ante la N°1 (el historial completo es de 17-2 para Serena) y un record de 1-4 en finales en Australia (ganó en 2008, cayó en 2007, 2012 y 2015).

ESPN

viernes, 30 de enero de 2015

El Ecuador Open Quito arranca este lunes con éxito de taquilla asegurado

Ecuador un país pequeño de Sudamérica tiene una gran afición por el tenis y durante su historia ha dado a este deporte jugadores de la talla de los guayaquileños Andrés Gomez y Nicolás Lapentti.



A pesar de que las vicisitudes de un país en desarrollo no permiten que este sea un deporte masivo, en la nación del "centro del mundo" su público es muy entendido en este deporte. Existe un interesante mercado para torneos tenísticos que el publico sigue con genuino interés.

Es un público que le gusta el tenis y si bien las grandes figuras siempre motivan más al público lo cierto es que el ecuatoriano sabe apreciar este deporte por encima de quien sea el que juega.

Ecuador ha sido lugar de transito para tenistas de mucho potencial que pasaron por aquí para  disputar sus torneos de nivel Challenger muy bien organizados y con mucha tradición como los que organiza Fabricio Valdivieso (Salinas, Manta y el extinto Quito) o el que hace Andrés Gomez en Guayaquil.

La experiencia previa sirvió para que una vez presentada la oportunidad (El torneo ATP en Viña de Mar ya no era viable) Ecuador diera el salto de nivel y se incluyera en el calendario principal de la ATP.

El esfuerzo conjunto de empresarios, auspiciadores y el propio gobierno que lo ve como una actividad que pone en vitrina al pais ha hecho posible que el Ecuador Open Quito. Torneo que en su cuadro principal arranca el lunes 2 de febrero. (la qualy se disputará desde el sábado)

Al igual que Viña, El ATP de la capital ecuatoriana tiene en contra el calendario. El inicio de la gira sudamericana no hace posible la llegada de grandes figuras. La mayoría vienen agotadas de Australia. Ha eso se suma que no son los mejores tiempos de la superficie de arcilla.

A pesar de eso y con el esfuerzo de la organización el Ecuador Open Quito ha logrado la conformación de un importante cartel de jugadores donde destaca la presencia de los españoles Feliciano Lopez y Fernando Verdasco. Además del colombiano Santiago Giraldo y el dominicano Victor Estrella, ambos en el mejor momento de su carrera. La defensa local estará a cargo de Giovanni Lapentti quien recibió un wild card de la organización. Otra invitación salió del duelo que se disputó entre Emilio Gomez y Gonzalo Escobar siendo este último el ganador.

Pero lo que en Chile era una preocupación (la respuesta del público) en Ecuador ese temor ha sido rápidamente superado pues la afición ha dado un gran respaldo a la organización, agotando las entradas para las jornadas de semifinal y final lo que asegura un ambiente propicio para que sea un gran torneo.

Sin duda Ecuador vivirá una gran fiesta del tenis durante una semana. Bien por ellos.


Djokovic tuvo más resto y superó a Wawrinka en cinco sets. Irá por título.

Las armas están preparadas y la puntería afinada. La Rod Laver Arena augura una de las grandes batallas de este Abierto de Australia y se viste de gala para recibir a los gladiadores. En Melbourne Park, Novak Djokovic, No. 1 del mundo, y Stan Wawrinka, vigente defensor del título, saltan a la pista central para mirarse a los ojos y discutir el pase a la final. Y la balanza cae del lado del serbio por 7-6(1), 3-6, 6-4, 4-6 y 6-0 tras tres horas y treinta minutos.



Sólo Roger Federer en activo presenta tantos trofeos en la pista dura australiana como el de Belgrado. Djokovic pasea ya por territorio aussie con 49 victorias en su carrera y quiere buscar la número 50 en las Antípodas para certificar su condición de pentacampeón. Lo dejó claro desde los primeros instantes del encuentro ante Stan Wawrinka, un rival ante el que había protagonizado duras maratones a cinco sets en los últimos tres enfrentamientos en los que se habían visto las caras en un Grand Slam (el tercero consecutivo en el Australian Open). Y la historia volvió a repetirse.

El partido marchaba a toda velocidad desde el inicio. En los primeros quince minutos el marcador ya lucía un empate a tres, gracias a la solidez en el servicio desde ambos lados de la pista, donde no había concesión alguna al rival. Hasta que Wawrinka dio un paso adelante. Subió el listón de agresividad y rompió el pacto de no agresión. Se intercambiaron reveses punzantes y derechas mortales. El suizo aprovechó su primera opción para quebrar el servicio de Djokovic en el séptimo juego y el serbio no dudó en devolverlo, en blanco, en el octavo. 100 por cien de efectividad en oportunidades de break.

Djokovic no perdió el impulso y apretó las clavijas al No. 4 del Ranking Emirates ATP. Tanto que en el siguiente juego al resto encontró petróleo en forma de dos nuevas opciones de quiebre. Pero no pudo aprovecharlas. Wawrinka se defendió con su servicio y logró salvar la situación para llegar hasta el tie-break. Un espectacular globo del serbio, que sirvió para firmar su primera ventaja, fue el punto de inflexión que le permitió poner rumbo hacia un desempate impecable en el que se impuso por 7-1.

Era el tercer tie-break que Djokovic afrontaba en el torneo, el tercero que caía a su favor (los anteriores fueron ante Fernando Verdasco y Milos Raonic). Por su parte, los 15 errores no forzados y el descenso de sus prestaciones en el saque, a través de un porcentaje de puntos ganados con el primer servicio del 67 por ciento y tan solo un 57 por ciento de saques acertados a la primera, condenaron al suizo. Y cerca estuvo de padecer el mismo castigo en el primer juego de la segunda manga, donde Djokovic disfrutó de dos nuevas opciones de break, que no pudo convertir.

Sin embargo, un error no forzado del serbio, el más doloroso: una doble falta, concedió la ventaja al suizo en el sexto juego del segundo set (2-4). Volvía a repetirse la situación de la manga inicial. Pero esta vez los latigazos de revés de Wawrinka sí castigaron a su rival para consolidar su ventaja. El de Lausana conservó su saque para apuntarse el parcial (3-6).

Djokovic resistió ante la versión más brillante del suizo, que amenazó su servicio inicial en el tercer set hasta en dos ocasiones. No solo contuvo el mejor momento en el partido del helvético, sino que fue capaz de esperar su oportunidad para aprovechar la primera opción de rotura que se le presentó en el segundo juego, poniendo tierra de por medio en el marcador (3-0). Lejos de venirse abajo, el suizo recuperó la desventaja con un nuevo break, esta vez en blanco, y devolvió el parcial de tres juegos (3-3). Sin embargo, a Wawrinka seguía sin funcionarle el primer servicio. Tanto que terminó el tercer parcial con solo un 52 por ciento de puntos ganados con el primero. Así, Djokovic sacó adelante un set en el que sólo conectó 4 winners. Su segundo quiebre en el décimo juego fue decisivo para apuntarse la manga (6-4).

A pesar de los buenos números en el servicio que durante los días anteriores habían demostrado, tanto Djokovic como Wawrinka, el resto seguía marcando la pauta en el partido. Tanto que a un break inicial en el cuarto set del serbio respondió inmediatamente otro del suizo. El de Belgrado dejó su registro de puntos con el primer servicio en este parcial por debajo del 70 por ciento por primera vez y lo pagó, a la par que el de Lausana aprovechó para hacerse con casi la mitad de los puntos que disputó al resto. Así llegó un nuevo quiebre y la victoria en el cuarto set (4-6).

Por cuarta vez consecutiva en un partido de Grand Slam entre Djokovic y Wawrinka, el triunfo final debía resolverse en el quinto parcial y por tercera vez seguida, el serbio iniciaba un set rompiendo el servicio de su rival. Era su quinta rotura del partido. En veinte minutos, dominaba la última manga (3-0). El número uno alcanzó su velocidad máxima de crucero para poner rumbo hacia la final del Australian Open, después de firmar un inmaculado set en blanco (6-0).

jueves, 29 de enero de 2015

Hewitt programa su retiro para Australia 2016. Sería capitán de la Davis

El ex número uno del mundo Lleyton Hewitt se retirará en 2016 después su aparición número 20 en el Abierto de Australia, según lo anunció el jugador australiano el jueves en Melbourne Park.



Rodeado de Patrick Rafter, ganador de dos torneos de Grand Slam, y del exjugador, comentarista y entrenador Wally Masur, el tenista de 33 años dio a conocer su intención a los miembros de la prensa.

“Tengo en mente jugar el Abierto de Australia el próximo año y seguramente poner fin a mi carrera allí”, afirmó.

“Personalmente, espero a que llegue la temporada de hierba y seguramente terminar mi carrera aquí en Melbourne, lo cual sería muy especial para mí porque sería la participación número 20 de mi carrera en el Abierto de Australia”.

Los comentarios de Hewitt siguieron al anuncio de retiro de Rafter como capitán de la Copa Davis de su país, pues este último quiere enfocarse plenamente en su nuevo cargo, el de Director de Tenis en Australia. Masur asumirá el cargo de capitán interino aunque espera eventualmente que Hewitt asuma ese rol.

“Lleyton tiene una conexión indiscutible con la Copa Davis y él será capitán algún día”, señaló Masur. “No se acostumbra en Australia tener a un capitán que sea jugar activo. Hablé con Lleyton hace unos días de eso y llegamos al arreglo de que seguiría siendo solamente jugador, pues tiene todavía una carrera activa y ya veremos donde termina. Hasta que eso pase, yo seré el capitán”.

Hewitt, ganador de dos torneos de Grand Slam, ha tenido como prioridad la Copa Davis a lo largo de su carrera, logrando los títulos con el equipo de Australia en 1999 y 2003. Ahora con un nuevo grupo de jugadores subiendo en los rankings, como Bernard Tomic, Nick Kyrgios y Thanasi Kokkinakis, el escenario está listo para que Hewitt haga un impacto como entrenador cuando finalice su carrera como jugador.

Por ahora, el actual número 87 del mundo, tiene como meta finalizar su carrera con la intensidad que lo caracteriza mientras se prepara para enfrentar a República Checa en la primera ronda del Grupo Mundial. Luego de haber sufrido algunas lesiones en los últimos años, al nacido en Adelaida dice que siente bien físicamente y listo para afrontar este reto.

“Mi cuerpo está bien”, dijo con confianza. “Creo que me entreno más duro que cualquiera en la pretemporada. Tuve quizás la pretemporada más larga de mi carrera, probablemente de unos tres meses. Mi cuerpo está bien en el momento. Por esa razón es que quiero seguir jugando.

“Obviamente estoy contento de poder seguir jugando la Copa Davis. Estaba esperando hace un tiempo a que llegaran a ayudarnos y tener la opción de llegar lo más lejos posible”.

ATP

Murray vence a Berdych y es finalista en Australia

Andy Murray clasificó para su cuarta final del Australian Open tras batir a Tomas Berdych por 6-7(5), 6-0, 6-3, 7-5 tras tres horas y minutos de juego librados en la Rod Laver Arena. El número 6 mundial, finalista en las ediciones de 2010, 2011 y 2013, vuelve a plantarse en la última ronda de Melbourne Park. En total, ya son ocho las finales alcanzadas en torneos del Grand Slam por el jugador británico.



En consecuencia, el escocés buscará ampliar su palmarés y peleará en Melbourne por alzar su tercera corona major tras las conquistadas en el US Open 2012 y Wimbledon 2013, ambas ganadas ante el serbio Novak Djokovic. 

Habiendo ganado los últimos dos enfrentamientos ante el británico, en el Mutua Madrid Open 2013 y en el Western & Southern Open 2013, Tomas Berdych no pudo contener la reacción de Murray en un partido de ida y vuelta.

El arranque del encuentro fue realmente bravo, siendo el checo el primero en golpear. Agarrado a un gran nivel de servicio (76% ganado con primer saque), 20 de 23 puntos cerrados en la red y 16 tiros ganadores, pudo asestar el primer golpe ante el británico. Fue un set de resistencia para Tomas, pues soportó el sinsabor de no cerrar al saque con 5-3 la primera manga y después tener que levantar dos minibreaks en el tiebreak (0-1, y 1-3) hasta tomar ventaja en la semifinal.

La reacción de Murray no se dejó esperar y su ascensión en la segunda manga, con apenas dos puntos cedidos al saque y aprovechamiento óptimo de sus opciones de rotura (3 de 3), se vio reflejada por un contundente 6-0. Un resultado que Tomas Berdych, reducido a un mero tiro ganador, no encajaba en un Grand Slam de pista dura desde la edición de 2005 del Abierto de Australia (p. ante Guillermo Coria). 

El checo acusó el golpe, siendo el escocés capaz de seguir acelerando. Andy terminó de dar forma a la remontada, quebrando para 4-2 en un parcial donde apenas un quiebre bastó para marcar las diferencias. Al igual que en el segundo set, Murray no encaró una pelota de rotura, anduvo implacable con primer servicio (84% ganado) y se mantuvo perfecto en sus acercamientos a la red (5 de 5), para tomar ventaja por primera vez en el encuentro.

El tercer parcial anduvo realmente apretado, con Berdych buscando la reacción con derechas paralelas, un golpe apenas empleado en los dos sets previos. Murray resistió el arreón, salvó pelotas de rotura que no encaraba desde el primer parcial y siguió firme al servicio (81% ganado con primer saque). Apenas un quiebre de Murray en el undécimo juego marcó las diferencias. Fue la única opción de rotura de que dispuso el escocés en el parcial y le colocó sirviendo para ganar el partido. Lo hizo con frialdad, en blanco y con un ace para plantarse en la gran final de Australia.

El de Dunblane, en consecuencia, competirá contra la historia en Melbourne. Ningún jugador, desde que en 1905 se pusiera en marcha el torneo, encadenó cuatro finales perdidas en el Australian Open. De hecho, el escocés comparte con el sueco Stefan Edberg (subcampeón en las ediciones de 1990, 1992, 1993) el trago de ser los únicos jugadores en haber hilado tres finales entregadas en la Era Abierta en el primer Grand Slam del año.

Al entregar la semifinal de Melbourne, Tomas Berdych retrocedió en su balance en la penúltima ronda de los Grand Slam, habiendo entregado cuatro de las cinco disputadas.

Andy Murray se enfrentará en la final del Australian Open, a disputar el domingo 1 de febrero, al ganador de la semifinal que enfrenta al serbio Novak Djokovic, número 1 mundial, y el suizo Stan Wawrinka, vigente campeón del torneo.

ATP

Serena Williams supera duro escollo y avanza a la final de Australia

Serena y Madison Keys (35ª, Top 20 desde el próximo lunes) protagonizaron un duelo mucho más parejo, aunque en el segundo set la N°1 pudo encaminar la historia con dos quiebres tempraneros y terminó llevándose el partido por 7-6 (5) y 6-2.



Ambas estuvieron arriba del 70% en puntos ganados desde el primer servicio, alcanzaron doble dígito en aces y se repartieron el mando de los peloteos a pura potencia. Incluso Keys finalizó con ocho winners más que Serena (27 contra 19), pero lo desaprovechó con 39 errores no forzados, más del doble que su rival (16).

Williams venía de un recorrido en el torneo con muchos altibajos, yendo de menos a más ante Vera Zvonareva, Elina Svitolina y Garbiñe Muguruza, cediendo el primer set en estos dos últimos casos. Esta vez volvió a arrancar en desventaja (1-3), pero respondió a tiempo y no pasó sobresaltos en el tiebreak.

En ese desempate, Serena se escapó rápidamente por 4-1 y, cuatro pelotas después, quedó con triple chance de llevarse la manga. Las dos primeras, Keys las salvó con aces. En la tercera, nada pudo hacer ante un saque ganador de Serena.

Desde allí, una ráfaga. Quiebre de arranque para 2-0, otra rotura llegando a ventaja de 5-1 y una catarata de match points a disposición desde la devolución. Siete fueron los que dejó pasar en el séptimo game, con Keys resistiendo entre saques ganadores y bombas desde el fondo.

Ya con su servicio, y a la novena chance en total, Serena sentenció la victoria. Y algo más que eso: 23ª final de Grand Slam, N°1 reconfirmado y la posibilidad de alcanzar su 19° título Major, a la caza de Steffi Graf, con 22.

 Es así que el l primer Grand Slam de 2015 se definirá entre la N°1 y la N°2 del mundo ya que en la previa la rusa  María Sharapova se había impuesto a su compatriota Ekaterina Makarova. Será un duelo que puede ser considerado "clasico" y que será del deleite de los aficionados al tenis. 

ESPN

miércoles, 28 de enero de 2015

Sharapova con autoridad vence a Makarova y avanza a la final en Australia

MELBOURNE -- En la apertura de las semifinales del Abierto de Australia, Maria Sharapova fue mucho más que una tímida Ekaterina Makarova y se impuso por 6-3 y 6-2, para alcanzar su décima definición en Grand Slams. Ahora espera por Serena Williams o Madison Keys, que juegan en estos momentos.




Sharapova dominó de principio a fin a una rival que nunca supo cómo desequilibrarla. La campeona de 2008 tomó rápidas ventajas en ambas mangas y, aun entorpeciéndose el rumbo con repetidas doble faltas, lo resolvió con facilidad en sets corridos.

En el primer parcial, salvó dos quiebres de arranque para romper en la respuesta y escaparse por 3-0. Enseguida tuvo otro break point para 5-1, pero no pudo aprovecharlo y le dio aire a Makarova. Más cuando en el game posterior Sharapova encadenó dos doble faltas para quedar 15-40, y luego ceder su saque por primera -y única- vez en el partido.

Apenas una piedra en un camino muy llano para la N°2 de la WTA, que ganó ocho de los nueve puntos siguientes y firmó con autoridad la primera diferencia.

El segundo set repitió las formas, con Sharapova rompiendo por duplicado y adelantándose 4-0. Ventaja que ya Makarova no podría contrarrestar.

En el global, la ganadora combinó 23 tiros ganadores y 26 errores no forzados contra 11 y 29, respectivamente, de Makarova. Pero en la cancha, la diferencia fue todavía mayor.

En la segunda semifinal, duelo estadounidense entre la N°1 del mundo y una de los grandes proyectos sub 20 que ofrece el circuito femenino.

Serena tuvo un camino con muchos altibajos, yendo de menos a más ante Vera Zvonareva, Elina Svitolina y Garbiñe Muguruza, pero en cuartos mostró su mejor versión, con una arrolladora victoria sobre Dominika Cibulkova, finalista en Australia 12 meses atrás.

Ahora, a la caza de su 19° Major, se enfrentará por primera vez en su carrera con otra jugadora que hace de su potencia la mayor virtud. "Madison tiene un saque espectacular y una derecha muy fuerte. Además ha mejorado mucho sus movimientos", la elogió Williams en la previa.

Para Keys, como sucedió con Eugenie Bouchard el último año, se trata del salto esperado. A semanas de cumplir 20 años, y con una tutela especial, la norteamericana transita por primera vez una segunda semana en un Grand Slam y ya se cargó a Petra Kvitova y Venus Williams. Ahora, va por la N°1.

Vallverdu: "Berdych está preparado para ganar un Grand Slam"

Andy Murray y Tomas Berdych se miden mañana por un cupo en la final del Abierto de Australia en un pulso frenético. El escocés, que pierde el cara a cara con el checo por 4-6, tendrá a Daniel Vallverdu, su amigo y entrenador durante las últimas temporadas, sentado en la grada rival. Tras terminar su relación profesional en 2014, el número 7 del Emirates ATP Ranking decidió contratar al venezolano y emprender una nueva aventura juntos. El jueves por la noche buscará su segunda final de Grand Slam, después de alcanzar la primera en Wimbledon 2010.  



“Creo que Tomas está preparado para ganar un Grand Slam”, aseguró Vallverdu, el técnico del checo, antes de las semifinales. Lleva mucho tiempo estándolo. Quizás, cómo se ha dado este torneo lo esté un poco más ahora”, añadió, refiriéndose a la victoria en cuartos de final ante Nadal y a la ausencia de Federer, que tampoco está ya en el torneo. 

“Será como cualquier otro partido. Ya se conocen bien, va a ser como siempre”, adelantó sobre el encuentro contra Murray. “Hablaremos de la táctica, nos pondremos de acuerdo, y será la misma rutina. La mayoría de trabajo que hago es antes, no durante el partido. Por supuesto, voy a estar ahí para darle apoyo moral, animarle, pero no hay mucho que pueda hacer durante el partido. Soy intenso en los entrenamientos, pero lo que pase en la pista depende de él. Tomas a hecho un gran trabajo. Cada partido que juega le veo muchas cosas positivas. Está en un gran estado de forma”. 

El checo, como su técnico, es positivo de cara al partido. “Definitivamente puede que sea una ventaja para nosotros”, dijo Berdych sobre su nuevo entrenador, que conoce a Murray desde hace 15 años y hasta diciembre del año pasado llevaba 5 temporadas trabajando con él. “Lo que realmente importa es estar preparados para ese partido, estar listos, preparar un plan y tratar de ejecutarlo en la pista. La preparación será la misma que con los otros jugadores hasta el momento. No voy a cambiar nada”, cerró.

“Dani conoce de arriba a abajo mi juego, sabe mi forma de jugar mejor que nadie”, dijo el británico. “Sé que saldrán ahí afuera con un gran plan. Quizás, él sea un pelín más favorito que yo por cómo ha estado jugando estas dos semanas”, añadió. “También sé lo que Dani piensa del juego de Berdych porque ya me lo ha dicho en más de una ocasión, así que funcionará en las dos direcciones”.

En Melbourne, la primera batalla por estar en la gran final del domingo: Tomas Berdych contra Andy Murray.

ATP

Novak Djokovic se instala firme en semifinales de Australia

Intratable. Soporta la presión como pocos. Novak Djokovic mantiene su estado de gracia en el Australian Open y su incuestionable candidatura como primer favorito para hacerse con el título en el primer Grand Slam de la temporada. Al menos así lo reflejan sus números. Y es que el serbio no ha cedido un solo set durante los cinco partidos que le han llevado hasta las semifinales. El último, frente al octavo cabeza de serie, Milos Raonic, que acabó ganando por 7-6(5), 6-4 y 6-2 en dos horas.



Australia sigue siendo territorio talismán para el número uno del mundo. En Melbourne Park se ha adjudicado la victoria en 30 de los últimos 31 partidos que ha disputado desde 2011, o lo que es lo mismo, registra un 97% de éxito en este torneo desde aquella edición. Frente al canadiense, un rival ante el que jamás había perdido en los cuatro enfrentamientos previos, no hizo una excepción, encadenando su quinto triunfo en el FedEx ATP Head2Head (5-0).

Con la misma moneda. Así pagó Novak Djokovic el primer punto del partido ante Milos Raonic, conectando un saque directo y cerrando el juego inicial en blanco en apenas un minuto. El serbio insistía en el resto, donde fue hallando múltiples opciones para romper el servicio del canadiense. Tantas que acabó disfrutando de cuatro oportunidades durante la primera manga, pero cada vez que el canadiense se encontraba al límite conectaba un saque sin respuesta. 

Con el servicio como salvavidas, ganando un 78% de los puntos puestos en juego con el primer servicio y ocho aces, Raonic resistió y estiró el set hasta el tie-break. Cansado de esperar y de dejar pasar oportunidades, el serbio marcó la diferencia y con dos puntos de ventaja (43 a 41) se impuso en el desempate por 7-5. 

Djokovic aprovechó la inercia positiva en el inicio del segundo parcial para asestar un nuevo golpe al partido. Nada más arrancar firmó el primer break del encuentro a la séptima opción que se le presentó. Asimismo, el de Belgrado se mostró intratable con su servicio, elevando el porcentaje de puntos ganados con el primer servicio hasta el 94% y traduciendo en éxito cada una de las siete aproximaciones a la red que efectuó (6-4). 

El inicio del tercer parcial fue un reflejo del segundo. Djokovic apretó al resto para tratar de quebrar el servicio de su rival, pero esta vez a Raonic le funcionó el saque para defenderse con éxito. Hasta el tercer juego. El serbio adquirió una ventaja de (0-40) que no dejó pasar para romper el servicio a Raonic por segunda vez en el partido y tomar una ventaja que ya sería demasiado pesada. Mucho más después de un nuevo y definitivo quiebre que sirvió para dejar el marcador final en 6-2. 

Un Djokovic impecable y una lista de errores demasiado larga (36) para tumbar al número uno del mundo sentenciaron al canadiense y permitieron al serbio lograr su 25ª clasificación a las semifinales de un Grand Slam, estrechando la diferencia con Andre Agassi.

Novak Djokovic cada vez tiene más cerca el objetivo de las 50 victorias en territorio australiano, lo que sería sinónimo de levantar su quinta corona de campeón en el primer Grand Slam del curso (hasta el momento suma 48 triunfos). Aunque para eso tendrá que derribar antes a Stan Wawrinka en semifinales, un jugador con el que se enfrentará por tercera edición consecutiva en este torneo. Con el suizo presenta un balance favorable (16-3). Eso sí, el serbio tratará de vengar la derrota en cuartos de final de la pasada edición en Melbourne. Djokovic mantiene intacta su condición de primer favorito para levantar el que sería su octavo Grand Slam.

ATP

Wawrinka dio clase de tenis ante Nishikori y es semifinalista en Australia

Stan Wawrinka accedió a las semifinales del Australian Open al derrotar al japonés Kei Nishikori por 6-3 6-4 7-6(6) en horas dos y cinco minutos disputados en la Rod Laver Arena de Melbourne Park. El de Lausana, cuarto cabeza de serie, se deshizo del asiático en un partido bravo donde subrayó su condición de candidato a revalidar la corona levantada en 2014.



Fue un golpe de autoridad en gran escenario el japonés, porque Nishikori tumbó a Wawrinka en los cuartos de final del pasado US Open. Un recuerdo que en nada pareció alterar los nervios de Stan, que se sacó un partido solvente ante el número 5 del mundo.

Contundente, autoritario, directo. Desde la primera pelota el vigente campeón mostró una solidez difícil de parar. De golpazo en golpazo, Wawrinka construyó una victoria contundente en tres parciales, dejando en el olvido las cinco mangas de Nueva York en las que se entregó ante el asiático. Un partido que voló a gran velocidad, donde el helvético selló las dos primeras mangas en apenas una hora. 

Un total de 20 servicios directos, disparado con un 86% de puntos ganados con primer servicio y un papel prácticamente perfecto en la red (11 puntos ganados de 13 jugados) sirvieron para hilar un triunfo amplio.

En un tercer set equilibrado, donde contuvo la reacción de Nishikori (2-0) con una recuperación de servicio inmediata, el tiebreak sirvió para dictar sentencia. Wawrinka pronto levantó una ventaja casi definitiva, con un 6-1 que le entregó cinco pelotas de partido, sólo para ver cómo Nishikori lograba equilibrar hasta el 6-6. Finalmente, un tiebreak ganado en 14 puntos le dio el pase a la penúltima ronda.

“Siempre es complicado cerrar el partido” reconoció Wawrinka, que resopló al recordar esas cinco pelotas de partido neutralizadas. “En la anterior ronda logré levantar un 6-2. Estos momentos siempre son especiales. Pero estoy contento por haber superado ese momento y poder clasificar a la siguiente ronda”. Indicó.

Alcanzando su segunda semifinal consecutiva en Melbourne, tercera de Grand Slam que alcanza el de Lausana en su carrera, Wawrinka prolonga la inercia del arranque de temporada, donde se encuentra invicto (10-0) tras revalidar su corona del Aircel Chennai Open antes de llegar a Australia. 

En Melbourne, Wawrinka aspira a proteger la corona de Melbourne , algo que tan solo Novak Djokovic, Roger Federer y Andre Agassi lograron en las últimas dos décadas. “No vengo a revalidar un título”aclaró Wawrinka. “No tengo esto en la cabeza. Vengo a jugar un Grand Slam distinto. Lo dije al principio del torneo. Voy a ir partido a partido. Me quedan duros encuentros por delante”.

ATP

martes, 27 de enero de 2015

Serena avanza a semis en Australia y asegura número 1. Ahora va por Keys

MELBOURNE -- Doble objetivo concretado para Serena Williams en el Abierto de Australia. Por un lado, la menor de las hermanas derrotó a Dominika Cibulkova y pasó a las semifinales y, como premio extra, se aseguró seguir como Nº1 del ranking mundial de la WTA cuando finallice este torneo. En cambio, Venus, la mayor, perdió con Madison Keys, quien así logró su mejor actuación en los Grand Slam, y evitó otro duelo entre las hermanas.



Esa meta de irse de Melbourne en lo alto de la clasificación ya es una realidad para la poderosa Serena, independientemente de lo que haga después la rusa Maria Sharapova, instalada en una semifinal frente a su compatriota Ekaterina Makarova..

Por eso se trató de un partido muy importante para la menor de las famosas hermanas estadounidenses. Y vaya si lo jugó como tal: venció a la eslovaca por 6-2 y 6-2 con autoridad, pegándole durísimo a la pelota y marcando el ritmo, apoyada en su gran saque y mucha convicción para tirar y no aflojar.

Firme en cumplir su libreto, Serena ratificó por qué ganó cinco veces el Abierto de Australia (el último, en 2010) y suma 18 títulos de Grand Slam. Sin fisuras, le quitó la ilusión a Cibulkova (10ª del mundo y 11ª cabeza de serie) de poder dar el golpe y repetir luego la final alcanzada aquí en 2014, en la que sigue siendo su mejor tarea en los Majors.

La ganadora se llevó el 83% de los puntos jugados con su primer servicio y logró 15 aces, contra el 52% de su rival en ese rubro. La aplanadora Serena selló 31 tiros ganadores y la eslovaca, apenas 13. Todos indicadores de lo que fue el encuentro. Como si fuera poco, le quebró el saque a la europea en cuatro de las siete chances que generó y la perdedora no pudo rematar ninguna de las dos que tuvo.

Así, Serena quedó 5-0 en los duelos contra Cibulkova y, ni bien terminado el partido, dijo que espera mantener la racha en Australia, ya que las cinco veces que llegó a semifinales terminó logrando el título. Quizás esta sea la sexta, aunque le faltan dos peldaños más. Eso sí: dejó en claro, una vez más, que es candidata y sus rivales saben lo que representa por juego y mentalidad.

Para Venus (18ª preclasificada), este certamen era especial, ya que no había hecho cuartos de final en los Grand Slam desde que se le detectó el síndrome de Sjogren. Pero no tuvo consistencia en el decisivo tercer set y fue presa de la potencia de Keys, que se impuso por 6-3, 4-6 y 6-4.

La jovencita de 19 años (35ª en el ranking) dominó en el comienzo con su agresividad, forzó a las líneas a Venus, 15 años mayor, y parecía encaminada a un claro triunfo. Pero mostraba gestos de dolor y Venus se adelantó 4-1 en el segundo parcial.. Allí la posterior ganadora pidió asistencia a la fisioterapeuta y recibió masajes en la zona lumbar y fue vendada en la pierna izquierda en los vestuarios.

Volvió, descontó y empató 4-4. Enseguida Venus quebró y luego mantuvo para estirar la lucha al decisivo set. Allí la historia parecía diferente, porque fue Venus la que encontró más solidez y quedó 3-1, ante una Keys con dudas y que fallaba más de la cuenta. Pero la pequeña recuperó la rotura y luego empató 3-3. Acto seguido, llegaron dos quiebres al hilo hasta que la vencedora consiguió otro break en el décimo y selló su victoria.

Así, Keys definió siete de las nueve chances de rompimiento, frente a sólo cinco sobre 10 para Venus. En los números, la mayor diferencia la marcó justamente la ahora nueva semifinalista al punto de concretar 34 tiros ganadores, contra apenas 10 de la mayor de las Williams. Por eso, su audacia tuvo premio extra y festejó con muchas ganas un boleto soñado.

La nueva sensación venía de darse el lujo de eliminar a la checa Petra Kvitova (4ª), actual campeona de Wimbledon. Por algo su coach es la también estadounidense Lindsay Davenport, ex Nº1 y rival de ambas Williams, quien supo elegir y optó por acompañarla en el circuito. Y vaya si la unión va dando sus frutos.

Así, una tenista de Estados Unidos y una de Rusia, gane quien gane en cada semifinal, estarán frente a frente en la finalísima del sábado. Realmente, imperdible.

ESPN

Murray acabó con el sueño de Kyrgios y es semifinalista en Australia

Amaneció en Melbourne y llegó la hora de despertar. Andy Murray puso fin al sueño de Nick Kyrgios en el Abierto de Australia. El No. 53 del mundo era el último jugador local en liza, pero el escocés terminó con su andadura en la Rod Laver Arena. Por segunda vez en su carrera, el de Canberra había avanzado hasta los cuartos de final de un Grand Slam, pero este martes el No. 6 del Ranking Emirates ATP acabó con su progresión, tras dos horas y cuatro minutos por un resultado de 6-3, 7-6(5) y 6-3.



Lejos de saltar a la pista intimidado o con más presión de la necesaria por asumir el nuevo rol de ídolo local, Nick Kyrgios propuso sus cartas desde el inicio, adjudicándose los dos primeros puntos del partido desde el resto. Pero Murray reaccionó y mantuvo su servicio. Y es que sin apenas intercambios largos, los saques imperaron hasta el sexto juego del partido. El escocés convirtió la segunda opción de quiebre que dispuso para despegarse en el marcador.

Mientras el australiano proponía un tenis agresivo y de riesgo (14 errores no forzados), Murray mantenía el equilibrio en la balanza entre winners y fallos (12-7). Además sus impecables números con el servicio -sólo cedió cinco puntos con su saque en la primera manga- le permitieron cerrar el set a su favor en sólo 32 minutos (6-3).

Kyrgios aportaba la fantasía y la magia, Murray la solidez y la determinación. El australiano inventaba golpes imposibles, el escocés no presentaba un solo agujero en su juego. Tanto que aseguraba el 91 por ciento de los puntos que ponía en juego con el primer servicio. En ese escenario, el partido seguía decantándose del lado del jugador con mejor ranking. Y eso que Kyrgios elevaba su nivel de agresividad, con constantes subidas a la red. Pero el segundo parcial desembocó en un tie-break (7-5), que se apuntó el de Dunblane con uno de los dos espectaculares globos que conectó en el desempate.

En el tercer set, Murray repitió los mismos pasos que siguió en el inicio del partido. Y en el sexto juego no dejó escapar la ocasión para romper el servicio a su rival a la tercera oportunidad que se le presentó (4-2). Cuando parecía que el australiano estaba pagando la intensidad emocional invertida en un segundo parcial sin éxito, logró sus dos primeras bolas de break del encuentro y devolvió el quiebre al escocés.

El partido acabó con su tendencia ordenada y se encadenó la tercera rotura consecutiva. El australiano se vio obligado a jugar con segundos servicios y Murray aprovechó para ampliar, de nuevo, la ventaja. Cuando sacó para ganar el encuentro no perdonó (6-3) y puso rumbo a semifinales, sustentando la victoria en su fiabilidad con el saque (13 saques directos y un 80 por ciento de puntos ganados con sus primeros) y su resistencia desde el fondo de la pista, tanto en el resto como en los intercambios más largos.

Andy Murray, que este año ya ha mejorado los cuartos de final firmados la pasada edición (p. ante Roger Federer), estará por quinta vez en su carrera en las semifinales del Abierto de Australia. En la siguiente ronda le espera Tomas Berdych, que derrotó al No. 3 del mundo Rafael Nadal por 6-2, 6-0 y 7-6(5). Eso sí, el checo domina el Frente a Frente FedEx ATP al apuntarse seis de los diez enfrentamientos que han disputado. Murray no gana a Berdych desde 2012. En Melbourne ya están preparados para una nueva batalla.

Tomas Berdych demuele a Rafael Nadal y es semifinalista en Australia

Tomas Berdych accedió a las semifinales del Australian Open tras batir al español Rafael Nadal por 6-2, 6-0, 7-6(4) tras 2 horas y 13 minutos de encuentro celebrado en la Rod Laver Arena de Melbourne. El checo, séptimo cabeza de serie, rompe una racha de 17 derrotas consecutivas ante el mallorquín, se planta en la penúltima ronda del major aussie por segunda temporada consecutiva (p. ante Stan Wawrinka en 2014), y ya suma un total de cinco semifinales en torneos del Grand Slam.



Tomas protagonizó un arranque feroz, gobernando la primera manga con solvencia al aprovechar sus dos opciones de quiebre, ganar la mitad de los puntos al resto y soltar hasta nueve tiros ganadores para vencer la resistencia de Nadal. 

Lejos de frenar, la ventaja se hizo todavía mayor en la segunda manga. Tomas siguió empleando un juego directo, disparado por encima de la veintena de winners, hasta levantar un 6-0 en apenas 25 minutos e hilar un total de ocho juegos consecutivos sobre el mallorquín. 

Fue un partido que voló a gran velocidad, pues Berdych cercó los dos primeros sets sin encarar pelota de quiebre en apenas una hora de juego, asestando a Rafael Nadal el primer 6-0 en Grand Slam desde que Roger Federer lo lograse en el primer set de la final de Wimbledon 2006, el tercero de su trayectoria en majors contando el recibido ante Andy Roddick en el US Open 2004. En esas, el balear se encontró ante la misión de remontar dos mangas, algo que solamente logró en dos ocasiones durante su carrera, ambas sobre césped: en Wimbledon 2006 (v. ante Robert Kendrick) y Wimbledon 2007 (v. ante Mikhail Youzhny).

Pero la pegada del checo no dio lugar a la reacción del español, y un tercer set vertiginoso sirvió para cerrar el encuentro. Sin una sola rotura, y después de que Rafael Nadal salvase dos pelotas de partido con 5-6 15-40, el partido se decidió en el tiebreak. La solidez de Berdych volvió a imponerse desde el comienzo, y en el cambio de lado construyó un 5-1 casi definitivo. El checo, que llevaba nueve años sin derrotar al español, terminó cerrando el partido con 7-5 en la muerte súbita.

“Tenía el plan fijado, ha salido bien. Creo que he tomado buenas decisiones en general” declaró el checo tras consumar la victoria. “Cuando juegas ante Nadal lo primero que debes asegurar es que él no tenga el control, que no diriga los intercambios. Hacerle correr. Creo que lo conseguí y estoy contento” resumió, tras disparar 46 tiros ganadores ante el mallorquín. 

La victoria de Tomas Berdych sobre Rafael Nadal evitó una marca de dominación deportiva en el tenis profesional, pues el balear aspiraba a ser el primer jugador en la Era Abierta en lograr 18 victorias consecutivas ante un mismo oponente. Tomas cortó una sequía de nueve años ante el mallorquín, al que no derrotaba desde los cuartos de final del Mutua Madrid Open de la temporada 2006. 

“He jugado este partido de forma distinta. Me siento fuerte físicamente y también a nivel mental. El trabajo que hice previamente se notó. Sabía como comenzar y cómo afrontar el partido, especialmente en los dos primeros sets”, reconoció un Berdych que firma un gran arranque de temporada, pues peleará por entrar en la final del Australian Open tras quedar subcampeón en el Qatar ExxonMobil Open (p. ante David Ferrer) en la primera semana del curso. 

ATP

sábado, 24 de enero de 2015

Bouchard y Sharapova avanzan a cuartos en Australia

MELBOURNE -- Pasó un susto muy grande en segunda ronda, pero ella volvió a ganar con una paliza. Maria Sharapova, N°2 de la WTA, aplastó a Shuai Peng y sacó boleto a cuartos de final en el Abierto de Australia, donde tendrá un gran choque contra Eugenie Bouchard (7ª). Cierra la jornada Simona Halep (3ª). 


La rusa, ex líder mundial y campeona en Melbourne en 2008, no le dio opciones a la china Peng (21ª), semifinalista del pasado US Open, a la que venció por 6-3 y 6-0 en la Rod Laver Arena. Con potencia y mucha determinación, marcó una diferencia enorme y no dudó a la hora de cada definición.

La siberiana obtuvo el 73% de los puntos con su primer saque, contra el 53% de la asiática, mientras que le quebró el servicio en cinco ocasiones. Siete tiros ganadores más festejó Sharapova y en especial se equivocó menos, con 15 errores no forzados frente a los 29 de Peng.

En Australia, Sharapova se juega mucho más: busca recuperar el N°1 del mundo. Para subirse a la cima necesita hacerse con el título o bien ser finalista y que la estadounidense Serena Williams no llegue a semifinales.

En la siguiente ronda, la rusa jugará con Bouchard, que hizo semis en Melbourne hace 12 meses y esta vez se impuso a la rumana Irina-Camelia Begu (42ª) por 6-1, 5-7 y 6-2. La canadiense arrasó en el comienzo, llegó a estar 3-0 (con dos quiebres a favor) en el segundo set, pero se apuró y creció su rival.

La lucha fue tal a partir de entonces, sufrió Begu para cerrar ese segundo parcial y finalmente Bouchard volvió a ser la dominadora con su juego agresivo desde la base. La vencedora tuvo 10 winners más (33 ante 23) y en el recuento final ganó 24 puntos más que su oponente.

En tanto, Halep, cuartofinalista en este campeonato el año pasado, pretende sumar otra alegría y seguir en la lucha por los primeros puestos de la clasificación. La rumana llegó a estar Nº2 en 2014, su temporada más exitosa, en la que trepó a la final en Roland Garros y el Masters y a las semifinales de Wimbledon.

La rival de Halep es la belga Yanina Wickmayer (80ª), quien nunca llegó a cuartos en los Grand Slam, por lo que se trata de un objetivo muy valioso para ella.

La que gane se medirá en la siguiente rueda con Ekaterina Makarova (10ª), quien dio cuenta de la alemana Julia Goerges (73ª; ex Top 15) al imponerse 6-3 y 6-2. Así, la rusa se metió, por primera vez en su carrera, al menos en cuartos de final en tres Grand Slam al hilo (inclusive, en el US Open trepó a semis).

Wawrinka, Djokovic, Ferrer y Nishikori avanzan a octavos en Australia

MELBOURNE -- Se completan los últimos casilleros para la segunda semana del Abierto de Australia, para donde ya sacaron boleto el N°1 del mundo, Novak Djokovic, y el vigente campeón, Stan Wawrinka (4°). El serbio superó por 7-6 (8), 6-3 y 6-4 a Fernando Verdasco (33°), mientras que el suizo hizo lo propio ante Jarkko Nieminen (72°), también en sets corridos. Además, victorias de Milos Raonic (8°), Kei Nishikori (5°) y David Ferrer (10°), en un cierre realmente dramático frente a Gilles Simon (20°).



Djokovic completó el encuentro sin quiebres en contra, con la mitad de errores no forzados que su rival (24 contra 50) y cinco tiros ganadores más (43 y 38). Pero en la primera hora de partido todo aún era incertidumbre...
Es que a fuerza de 10 aces y de la potencia de su primer servicio, Verdasco se mantuvo nivelado hasta llegar al desempate inicial, salvando seis chances de quiebre en el camino. Incluso allí tomó ventaja de 5-3, pero una doble falta le quitó el minibreak y desde allí fue Djokovic quien tomó las riendas. La definición se estiró unos cuantos puntos más, pero fue siempre el español el urgido. Pudo salvar tres pelotas de set (la segunda, con un enorme drive paralelo). Pero la cuarta fue la vencida para el N°1.

Con el envión, Djokovic logró en el arranque del segundo capítulo lo que no había podido en 60 minutos: quebrar a Verdasco. 2-0 al frente, el serbio dio una nueva muestra de carácter, levantando un 0-40 con dos aces y otro saque ganador. Fundamento sólido para encaminar una nueva diferencia.

En el tercero, volvió a ejercer presión desde el comienzo, ante un Verdasco que bajaba muchísimo sus números al servicio con el segundo golpe (36% de puntos ganados, contra 76% con el primero). En la cuarta oportunidad que tuvo, facturó para 4-2 y sentenció la suerte del encuentro.

La estadística negativa para el ganador: en el global solo materializó 2/14 chances de quiebre. Efectividad que puede pagar caro ante su próximo rival: Gilles Muller (42°), que promedia casi 30 aces por partido en el torneo y ganó los cinco tiebreaks que le tocó disputar en la semana.

Además, el luxemburgués llega con un impulso particular: un año atrás se encontraba jugando Futures después seis meses de inactividad por una lesión en el codo y hoy, a los 31 años, vive nuevamente el mejor ranking de su carrera. Este sábado, su víctima fue John Isner (21°), ante quien cedió una sola chance de quiebre (desaprovechada) en todo el encuentro, antes de vencer por 7-6 (7), 7-6 (8) y 6-4.

El norteamericano, a su vez, sigue sin dar la talla en los Majors: apenas cuatro veces alcanzó una segunda semana en ya 27 presentaciones. Y solo una vez pasó de octavos: en el US Open 2011, donde hizo cuartos.

Wawrinka, por su parte, se impuso a Nieminen por 6-4, 6-2 y 6-4, siempre agresivo y buscando la iniciativa; patrón que en este caso se tradujo en 55 tiros ganadores, contra apenas 18 del finlandés, que pisaba esta instancia en un Grand Slam por primera vez en más de seis años.
Con el avance, entonces, el suizo estiró dos invictos: en Australia, a nueve partidos. Y en lo que va del año, a siete (viene de ser campeón en Chennai), aunque se le puede sumar también el primer punto por Copa Davis, en la final de 2014.

En octavos, Wawrinka aguarda por el español Guillermo García López (37°), que no le dio chances a Vasek Pospisil (60°). El canadiense arrastraba molestias en la previa, que se habían hecho visibles en su duelo de segunda rueda ante Paolo Lorenzi y que luego lo forzaron a bajarse del dobles.

Curiosamente, las lesiones de Pospisil en el pasado habían oficiado como "talismán" para Wawrinka: en Chennai 2014, se retiró cuando estaba set abajo y luego el suizo fue campeón. 20 días después, debían reencontrarse justamente en tercera de Australia. Pero el norteamericano no se presentó y el camino que siguió el helvético es conocido. Esta vez, sin embargo, no habrá tercer acto.

En otros resultados, Raonic superó en sets corridos al alemán Benjamin Becker (41°), igualando su techo en Australia: los octavos que ya había alcanzado en 2011 y 2013. Ahora buscará subir la vara, con los antecedentes positivos del último año en Wimbledon (semifinales) y Roland Garros (cuartos).

Su rival será el español Feliciano López (14°), que derrotó también en tres mangas al polaco Jerzy Janowicz (44°). Esta vez, no hubo drama extra para el ibérico, que en primera ronda había salvado tres match points ante Denis Kudla, con victoria final por 10-8 en el quinto set, y en segunda había estado asimismo al borde de la eliminación frente a Adrian Mannarino, que sacó para partido 5-3 en el tercero, pero se derrumbó físicamente y abandonó pocos games después.

Otro favorito que avanza mientras aún busca su mejor forma es Nishikori. Ante Steve Johnson (38°), el japonés volvió a comenzar set abajo, pero acusó el golpe dejando solo seis games en el camino en el resto del partido.

En octavos tendrá una buena prueba ante Ferrer, que lideraba a Simon 2-0 en sets y 5-3 en el tercero, pero debió sufrir bastante más. El francés reaccionó con cuatro games en fila y se mantuvo en partido hasta que el español se escapó por 5-2 en el cuarto. ¿Partido definido? Negativo. Otro break de Simon con Ferrer sirviendo para match y, minutos después, ¡tercero! en esa instancia límite, igualando ya las acciones en 5-5. En el tiebreak, sin embargo, llegaría la descarga final para el ibérico, que terminó caminando como pudo hacia la red.

ESPN

viernes, 23 de enero de 2015

Serena, Venus y Agnieszka Radwanska avanzan a octavos en Australia

MELBOURNE -- Otra vez no empezó en gran forma, pero supo revertir la imagen inicial y terminó festejando otra victoria merecida. Serena Williams, Nº1 del mundo y cinco veces campeona en Melbourne, derrotó a la ucraniana Elina Svitolina y avanzó a octavos de final en el Abierto de Australia. También juega Petra Kvitova (4ª). Ganaron Agnieszka Radwanska (6ª) y Venus Williams.



Ganadora del US Open 2014, donde igualó a Martina Navratilova y Chris Evert con 18 títulos en los grandes torneos, Serena Williams busca otra hazaña y además quiere mantenerse en la cima del ranking WTA, lo que concretará en caso de hacer semifinales (le restan dos triunfos), sin importar lo que haga la rusa Maria Sharapova.

La estadounidense, de 33 años, se sobrepuso a la veloz Svitolina (26ª cabeza de serie), de 20, a la que superó por 4-6, 6-2 y 6-0 y no la dejó pasar por primera vez en su corta carrera profesional en la cuarta ronda de un Major.

Cierta descoordinación de Serena y la precisión de la derecha de Svitolina hicieron posible un arranque favorable para la ucraniana por 5-2, le costó cerrar ese set y luego lo hizo en su segundo intento con el servicio. La líder del circuito se plantó mejor a partir del segundo parcial, sacó mejor y fue dominando con su potencia y con apertura de ángulos a una rival de cuidado.

Serena concretó ocho de las 18 oportunidades de quiebre y le rompieron el propio servicio en cuatro ocasiones (Svitolina dispuso de nueve break points). En total, la vencedora terminó con 45 tiros ganadores y su oponente, con 27. Celebró con el puño apretado y no se detiene en su búsqueda del 19º título grande.

La rival de Serena Williams en octavos de final será la española Garbiñe Muguruza (24ª), nacida en Venezuela, quien superó en tres parciales a la suiza Timea Bacsinszky (41ª del mundo).

Por su parte, la agresiva checa Kvitova, actual campeona de Wimbledon, juega con la estadounidense Madison Keys (35ª), de 19 años, quien busca sus primeros octavos de final en los Grand Slam. La vencedora irá contra una jugadora de Estados Unidos: Coco Vandeweghe (37ª) o Madison Brengle (64ª).

Dirigida por Navratilova, la mayor de las hermanas Radwanska se deshizo de la estadounidense Varvara Lepchenko (30ª preclasificada) al vencerla 6-0 y 7-5. Así, ganó cada uno de sus tres partidos de esta semana con un set por 6-0 y fue la jugadora que más fácil llegó a octavos, al perder apenas nueve games.

La polaca se enfrentará en la próxima rueda con la histórica Venus Williams (18ª), quien se recuperó y superó en tres mangas a la italiana Camila Giorgi (33ª), de padre argentino. Así, la exnúmero uno arribó a octavos de un Major por primera vez en tres años y medio, desde Wimbledon 2011.

Fue un choque cambiante y lleno de emoción, en el que Venus tuvo cuatro tiros ganadores menos que Giorgi y la diferencia estuvo en los errores no forzados porque la perdedora cometió 62 frente a los 35 de la estadounidense. Por eso, la alegría es merecida para Venus, quien disfruta tras algunos años en los que sufrió desde que le detectaron el síndrome de Sjogren (enfermedad autoinmune).

ESPN