Sus éxitos ya no son una sorpresa para nadie. Dominic Thiem estrenó su reciente condición de Top 10 con un nuevo título esta temporada, después de derrotar a Philipp Kohlschreiber en la final de la Mercedes Cup en Stuttgart. El número 7 del Emirates Ranking ATP superó al jugador local por 6-7(2), 6-4, 6-4 en dos horas y 11 minutos.
Thiem encadena ya este curso un total de 4 títulos y, además de inaugurar su palmarés sobre césped, se convirtió este lunes en el primer jugador que consigue ganar un trofeo en tres superficies diferentes en 2016: tierra batida (Buenos Aires y Niza), pista dura (Acapulco) y hierba (Stuttgart).
Apenas seis semanas antes, Thiem y Kohlschreiber ya se habían citado en la última ronda para pelear por el título en el BMW Open by FWU AG de Múnich. En aquella ocasión, el alemán se impuso en una intensa final sobre tierra batida a tres set, resuelta en el tie-break (7-4).
Casi sin tiempo a tomarle el pulso al partido, en apenas 7 minutos los protagonistas tuvieron que regresar a los vestuarios con 1-1 en el marcador. La lluvia obligó a detener el juego durante cuatro horas, hasta que a las 18:40 pm (hora local) los jugadores regresaron a pista para retomar el encuentro.
Thiem volvió firmando un parcial de 7 puntos seguidos, los tres primeros en forma de aces, para cerrar en blanco su primer juego y encontrar las 3 primeras opciones de break. Sin embargo, el alemán fue defendiéndolas una a una hasta igualar 2-2. Con grandes porcentajes en el servicio, la agresividad de los restos no era suficiente para poner en jaque al saque del rival.
Por si fuera poco, desde el fondo la búsqueda de los ganadores dejaba una gran demostración de golpes de potencia. A un winner de derecha a 160 km/h de Thiem, respondía con otra Kohlschreiber a 155 km/h. Así se llegó al desempate, donde con 3-1 para el alemán y 44 minutos de juego apareció de nuevo la lluvia para detener el partido. Sólo dio tiempo a jugar un punto más (3-2) y el duelo fue aplazado.
A las 10:36 am de este lunes, se reanudó el tie-break con cuatro puntos consecutivos para Kohlschreiber. Dos grandes servicios del alemán, una doble falta y otro error más en la red de Thiem entregaron el set al número 25 del mundo (7-2).
Sin embargo, el primer quiebre no tardó en llegar. El tercer cabeza de serie abrió el segundo parcial con un break en blanco. Conservó la distancia en el marcador, gracias a unos números impecables con el servicio: 5 aces, 81% de puntos con el primer saque y 2/2 bolas de break salvadas para estirar el encuentro hasta el tercer set.
Apenas tres juegos fueron suficientes para que Thiem asestase un nuevo golpe al partido en forma de quiebre para adelantarse (3-1). Agresivo desde el fondo, buscando el ganador con la derecha, el austriaco fue empujando a su rival detrás de la línea de fondo. Incluso dispuso de otra opción más para firmar un doble break (4-3).
Kohlschreiber aún tuvo una última oportunidad para engancharse al partido. Pero cuando se le presentó la oportunidad de igualar a 4, estrelló en la red una volea cruzada. Incluso, cuando Thiem sacaba para cerrar el partido dispuso de dos opciones de break más, pero el austriaco se recompuso y mantuvo el listón con su saque (13/14 con primeros en el tercer set). Así llegó su cuarto título del año.
ATP
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