BUENOS AIRES, ARGENTINA: Lara Arruabarrena no podía haber soñado mejor debut. La española cumplió con creces con su condición de número uno y selló la permanencia de España en el Grupo Mundial II de la Fed Cup por BNP Paribas al lograr el 3-0 definitivo ante Argentina. Las albicelestes jugarán en 2016 el Grupo I Americas.
La 88 del mundo tuvo que batallar muchísimo y dar prueba de su madurez bajo el cálido sol otoñal de Tecnópolis para vencer a Paula Ormaechea (157ª) por 61 46 97 y disparar un abrazo apretado de un equipo joven, poco experimentado pero que se hizo fuerte en la una arcilla siempre difícil para las visitantes como la argentina.
“Ganar 3-0 es el resultado soñado, la permanencia es lo que vinimos a buscar”, dijo la estrella del fin de semana, que como le pasa habitualmente encapsuló todo el nerviosismo previo para sacarlo recién al final. “Solté toda la tensión. Terminé el partido y dije ffffffff… ya me puedo relajar”, resopló aliviada, consciente de que podría no haber festejado: “Hoy se ha definido por detalles”.
En la silla local quedó Ormaechea envuelta en lágrimas y bronca después de haber jugado un gran tercer set, lo mejor que se le vio el fin de semana. No le alcanzó y ni los aplausos del público al retirarse pudieron consolarla. Después de la descarga, a la hora de hablar con la prensa, el orgullo de haber podido dejar una buena imagen tras la fea derrota del sábado le ganó a la depresión.
“Estaba convencida de que lo podía ganar y jugué por momentos muy bien. Lamentablemente es muy difícil mantener el nivel todo el partido”, apuntó.
Después de levantar un set en contra y un 1-4 en el tercero siendo agresiva y fuerte mentalmente, llegaron al 7-7. “Saqué con mucho viento en contra”, explicó la argentina. Arruabarrena vio la chance y no dudó en meter cuchillo. “Ella jugó inteligente y fue merecida la victoria”, aceptó la chica de Sunchales.
En el momento de la definición la española fue implacable como en el primer set. Lejos de ser tan desparejo como sugiere el resultado, el inicio le sonrió a la vasca. “Los puntos fueron muy disputados. El 61 fue mentiroso”, reconoció la española, que se apoyó en un muy buen saque y una derecha picante, que taladró a Ormaeceha sobre el revés. Entre winners y errores forzados, Arruabarrena se llevó 18 puntos.
En la segunda manga, la irregularidad en el servicio se hizo presente junto al viento: fueron 7 breaks en 10 games, el último para que Ormaechea forzara un tercer parcial tras desperdiciar cuatro set-points. Parecía que igualar el partido iba a servirle de espuela a Paula. De hecho, a Lara le entraron las dudas. “Jugamos dos veces este año y en una yo estuve set arriba y 2-0. Vi que me estaba remontando y se me vinieron todos los fantasmas”, reconoció.
Pero la española no se dejó ganar por las sombras y se puso 4-1. En el lapso en que Ormaechea tiró todo adentro, un par de espíritus más le revolotearon aunque, a la hora de la definición, tuvo la cabeza clara para jugársela en pelotas clave. La audacia pagó dividendos y España disfrutará un año más en la segunda categoría de la Fed Cup.
Sábado
P1 - Sara Sorribes Tormo (ESP) a Paula Ormaechea (ARG) 46 76 (2) 61
P2 - Lara Arruabarrena (ESP) a María Irigoyen (ARG) 60 61
Domingo
P3 - Paula Ormaechea (ARG) v Lara Arruabarrena (ESP) 61 46 97
P4 - María Irigoyen (ARG) v Sara Sorribes Tormo (ESP)
P5 - Aliona Bolsova/Anabel Medina Garrigues a Tatiana Búa/Nadia Podoroska (ARG) (ESP) 46 61 10-3
Por Eduardo García Barassi
Fedcup.com
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