NUEVA YORK -- El mismo 2014 que marcó el primer salto de Kei Nishikori al Top 10 le deparó un camino espinoso en cuanto a lesiones, al punto de marginarlo de los últimos tres Masters 1000 y revivir las voces de alerta rumbo al US Open: "Tengo dudas sobre mi decisión. Guardo ciertas preocupaciones sobre mi físico. Pero voy a correr el riesgo", graficó el japonés en Nueva York.
Las primeras molestias de Nishikori llegaron en Madrid, con un dolor en la espalda que lo hizo ceder la final ante Rafael Nadal y luego bajarse de Roma. Con calendario ajustado, volvió para Roland Garros pero fue sorprendido en primera ronda. En esta gira norteamericana, solo jugó Washington. Luego se sometió a una cirugía para remover un quiste de su pie derecho y dejó pasar Toronto y Cincinnati. ¿Repetirá en Flushing Meadows la mala experiencia de París?
El jugador fue contundente: "Realmente no sé si podré ir mucho más allá de la primera ronda. No practiqué mucho [desde la operación] y no sé si seré capaz de mantener el ritmo a este nivel. Si el dolor reaparece el día de mi partido, tal vez no me presente".
El riesgo de Nishikori se ampara en que no defiende puntos en Nueva York, con lo cual todo progreso que consiga en el torneo será beneficioso para su ranking. En el debut, el japonés está programado para medirse con el local Wayne Odesnik (180°). Si (efectivamente juega y) prevalece, podría tener a Jack Sock en segunda, al argentino Leonardo Mayer en tercera y a Milos Raonic en octavos.
En cinco participaciones en el cuadro principal, Nishikori solo alcanzó la cuarta ronda una vez: en 2005, su primera participación. Curiosamente, dos de esas cinco incursiones terminaron con retiro. ¿Habrá una tercera?
ESPN
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