En la temporada de su recuperación, Juan Martín Del Potro está de vuelta al US Open, el torneo que ganó hace 7 años consiguió su primer Grand Slam. El argentino, que recibió una invitación de la organización para poder disputar el cuadro final, se siente como en su retorno a Flushing Meadows.
“Estoy en un lugar en el que fui muy feliz”, dijo el argentino a ATPWorldTour.com este sábado en Nueva York. “Cada pasillo que recorro… me siento muy feliz y honrado de estar en el US Open. Esta semana es muy especial, aunque después de tanto sufrimiento todas las cosas son buenas para emocionarme y disfrutar”, aseguró Del Potro, que sufrió cuatro operaciones en las muñecas y este año tomó la decisión de regresar poco a poco al circuito, reapareciendo en Delray Beach.
Ahora, tras varios meses de readaptación a la competición, Del Potro está de regreso en el US Open, posiblemente uno de los torneos más especiales de toda su carrera. “Volver a estar lugar es espectacular”, reconoció Del Potro, que en la final de 2009 venció a Federer para celebrar su primer Grand Slam. “Me hace sentir que soy un campeón. Hay un trato especial con los ganadores del torneo. Son los premios por haber ganado un torneo tan grande, algunas diferencias que hay”, prosiguió. “Estar tan cerca de no jugar nunca más y volver a vivir estas cosas es algo espectacular. Tal vez lo disfruto mucho más ahora porque sé todo lo que me costó estar aquí”, insistió. “Cada rincón que veo, cada lugar donde estoy, recuerdo las cosas que hacía en 2009, donde me preparaba, el sitio en el que celebraba… también la gente me hace sentir muy bien. Estoy muy feliz”.
El argentino, 142 del Emirates ATP Rankings, debutará ante un compatriota en Flushing Meadows y sabe que no existen rivales sencillos en torneos de la máxima exigencia. “Me toca jugar contra otro argentino”, recordó Del Potro, que se medirá contra Diego Schwartzman en la primera ronda del último Grand Slam de la temporada. “Obviamente, en un torneo tan importante no hay ningún jugador fácil ni una ronda sencilla. Yo dependo mucho de cómo estoy físicamente, de cómo me encuentro”, añadió. “Volver a jugar otro torneo tras todo lo que he vivido en Río no es sencillo, al margen de la parte emocional. Pero estoy en un lugar donde tengo recuerdos espectaculares. Volver a jugar el torneo otra vez me hace muy feliz”.
“Aquí todos los partidos son largos y el calor también es un factor importante”, recordó el tandilense. “Disfruto mucho de la oportunidad de jugar un partido de tenis, de jugar otro Grand Slam, sobre todo el US Open que es muy especial para mí. Si avanzo y me va bien será bienvenido, será mucho mejor, pero si no tengo bien claro que mi gran objetivo para esta temporada era volver a reinsertarme en el circuito, curarme de la muñeca y poder pegarle fuerte con el revés a final de año. Estoy por el camino correcto, cerca de lograr eso. Trato de no pensar en otras cosas y centrarme en ese objetivo”, continuó el campeón de 2009. Recuperarse, volver a empezar, sentirse fuerte y fijarse una meta. Así ha encarado este 2016 un Del Potro que vuelve a sonreír en pista, disfrutando de todo aquello que le hace ser jugador de tenis.
Aunque las sensaciones sean buenas, Del Potro no esconde el reto de las maratones a cinco sets. Bien es cierto que en la retina aún tiene el dulce recuerdo de Wimbledon, donde sumó una victoria ante un Top5 de la talla de Stan Wawrinka, dos veces ganador de Grand Slam. “En Wimbledon también fue una sorpresa ganarle a Wawrinka y jugar tan bien. A cinco sets los partidos cambian mucho, es muy difícil poner a un favorito porque pueden pasar muchas cosas, pero creo que voy a estar bien, en condiciones de jugar mi primer partido. Aquí hay que ir día a día porque pueden pasar muchas cosas. Quiero prepararme lo mejor posible. El tenis me está acompañando como quiero ahora mismo, pero tengo otros temas físicos y la parte emocional que para mí es fuerte”, fotografió con sinceridad.
El arduo camino para llegar hasta aquí ha sido más llevadero gracias al cariño de los aficionados al tenis, que no dejaron de enviar energía positiva al argentino. “Me emociona lo mucho que me apoyan en todos lados. Aquí y en todos lados. Cuando estuve lesionado mucha gente me mandó cariño para no tirar la toalla, para no bajar los brazos. Hoy me toca devolver ese cariño dentro de la pista, que es donde me toca estar y donde mejor me siento”. En Nueva York, Del Potro no quiere desaprovechar la oportunidad de regalar sus poderosas derechas. El de Tandil está listo para competir.
ATP