Novak Djokovic está a un triunfo de cerrar el círculo del Golden Masters. Ante las mayores adversidades, ha sobrevivido. El número uno del mundo superó en las semifinales del Western & Southern Open a la revelación del torneo, Alexandr Dolgopolov, en un encuentro que se estiró por dos horas y 20 minutos, terminando con 4-6, 7-6 (5) y 6-2 en el marcador. De esta manera, el serbio logra un repóker de finales en Cincinnati, el único ATP World Tour Masters 1.000 en el que todavía no se ha erigido como maestro.
Dolgopolov estaba 0-4 en toda su carrera en el Western & Southern Open antes de este 2015. Partido a partido y ronda a ronda, el ucraniano no sólo llegó hasta las semifinales siendo el primer qualy en lograrlo aquí desde David Wheaton en 1994, si no que lo hizo con ganas de superar ese hito. El objetivo: hacer historia. Desde la Era Open (1968), ningún jugador que disputó la fase previa alcanzó la final en Cincinnati.
La hazaña no podía ser más complicada. Ante el vigente número uno, que le había superado en los cuatro enfrentamientos previos, el último y quizá más doloroso en Miami, cuando iba set y break arriba. En Cincinnati les esperaba un guión similar, aunque el arranque fue perfecto.
El choque no pudo empezar mejor para Dolgopolov, que en el primer descanso ya dominaba 2-1 con break a favor. Dos dobles faltas consecutivas del número 66 del mundo entregaron el quiebre de las tablas a Nole, que sin empujar a su rival, se encontró de nuevo vivo en la manga inicial con un 3-3. El ucraniano reaccionó de inmediato, quebrando de nuevo el servicio de Djokovic. Una montaña rusa de set que terminó a favor de Dolgopolov, que disparó 12 golpes ganadores por los cinco del serbio.
Djokovic tuvo que salvar dos bolas de break nada más arrancar el segundo parcial. Con el tres iguales, le tocó remar de nuevo en un eterno juego de ocho minutos en el que hubo tres deuces y otra oportunidad de quiebre más para Dolgopolov. Fueron dos games bien amarrados que se volvieron cruciales para su supervivencia en el match. Inmediatamente después del maratoniano juego, rompió en blanco a su rival para servir por el empate en el choque.
Lo que no esperaba Nole era la reacción de su oponente, quien cual espejo devolvió el quiebre en blanco. El desenlace a tal frenético set solo podía decidirse en la muerte súbita. Allí Dolgopolov tuvo el triunfo en su raqueta, con dos saques y 5-4 arriba en el tie-break. Sin embargo, Djokovic ganó tres puntos consecutivos y llevó el partido al tercero y definitivo. Al borde del abismo, se hizo fuerte.
El thriller terminó con un Djokovic que ya no quiso dejar escapar la victoria. Contundente en los momentos trascendentales, el de Belgrado impuso su ley. Ya son diez finales consecutivas en este 2015 para el hombre más en forma del circuito.
Esta será la quinta final para Nole en Cincinnati. En las cuatro anteriores no pudo lograr un solo set. Ni contra Andy Murray (2008 y 2011) ni contra Roger Federer (2009 y 2012). Esa será la primera asignatura pendiente a superar si quiere completar el tan ansiado Golden Masters.
ATP
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