Un walkover a favor en un Grand Slam puede convertirse en un arma de doble filo. El beneficio, un día más de descanso inesperado para guardar energías en las piernas; la contrapartida, el riego de perder ritmo de competición. Sobre todo, en los primeros días del torneo. Rafael Nadal, que dio un paso adelante sin jugar en segunda ronda (w.o. Kokkinakis), tuvo que ir de menos a más para batir a Hyeon Chung (6-3, 6-4, 6-2) y asegurarse su presencia en la segunda semana del US Open.
Con la victoria de este sábado, el español sigue desbloqueando logros a lo largo de su carrera. El último en Flushing Meadows le ha permitido alcanzar los 60 partidos ganados en, al menos, tres de los cuatro Grand Slam junto a Roland Garros (93) y el Abierto de Australia (61). Además, son seis en total los escenarios donde ha conseguido superar esta barrera: Montecarlo (71), Roma (61) y Barcelona (61).
El campeón de 18 Grand Slam amplió además a 6 sus victorias consecutivas desde que inició su camino al título en el ATP Masters 1000 de Canadá. Y su porcentaje de éxito en pista dura este curso se eleva hasta un imponente 89,4% en los 19 partidos que ha encarado en la superficie.
Enfrente se reencontró con un rival, al que no se media desde 2017 y al que siempre ha ganado. Así, su FedEx ATP Head2Head está fijado en un 3-0 favorable al español, incluyendo su triunfo en la tercera ronda del US Open. Y es que Chung, ubicado en el No. 170 del Ranking ATP, vuelve a encontrarse con sus mejores sensaciones después de un año prácticamente en blanco debido a las lesiones.
El partido comenzó sin ritmo, donde los puntos cortos tomaron el protagonismo y a las muñecas de ambos lados de la pista parecía costarles calibrar las medidas de la Arthur Ashe. Sobre todo a la del coreano. Nadal apenas tardó en trabajar la primera opción de break con 1-0, 30-40, pero Chung impidió que convirtiese la ventaja tan pronto.
Las imprecisiones del coreano, con una lista de 12 errores en el primer set (y 37 en el partido), permitieron dos oportunidades de quiebre más al manacorense. A la tercera (1/3), un revés cruzado al pasillo concedió el único break del set para que el español se adelantara 4-2. Un impecable rendimiento con el primer servicio (11/11) por parte de Nadal garantizó la distancia en el marcador. Y con un ace cerró el parcial por 6-3.
Nadal mantuvo los mismos estándares en el segundo set para con un único break, dejarlo de su lado. Con el primer servicio ganó 12 de los 14 puntos que acertó a poner en pista, convirtió un quiebre (1/2) en el quinto juego, además de igualar la balanza de winners y errores a 21-21 a estas alturas del encuentro.
En la tercera manga, el balear dio un paso adelante y convirtió su primera opción de quiebre para sentenciar un partido en el que terminó dominando en todas las facetas del juego. En cuarta ronda Nadal tendrá que medirse con el campeón en 2014 Marin Cilic verdugo de John Isner.
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