El sueño de Pablo Carreño Busta sigue más vivo que nunca. El español 
de 26 años alcanzó hoy sus primeras semifinales de Grand Slam tras 
superar a Diego Schwartzman en un duelo que se estiró por hora y 59 
minutos y terminó con 6-4, 6-4 y 6-2 en el marcador.
"Es algo que siempre había soñado y es muy emocionante poder estar en
 semifinales", apuntó Carreño. "He intentado estar muy concentrado. 
Diego es un luchador y he tenido que ser agresivo y tratar de dominar 
los puntos", continuó aún en pista.
De esta manera, y cuando se actualice la clasificación del Emirates 
ATP Rankings el próximo lunes, Carreño podría ingresar en el Top 10, 
convirtiéndose en el sexto jugador español en esta última década en 
formar parte de los mejores diez jugadores del mundo tras Rafael Nadal, 
David Ferrer, Tommy Robredo, Fernando Verdasco y Nicolás Almagro. Si Sam
 Querrey pierde hoy o en semifinales, Carreño irrumpiría en el grupo de 
élite del circuito. Si es el estadounidense quien progresa hasta la 
final, el español subiría hasta el No. 11 del mundo.
Si bien era su primer enfrentamiento, ambos jugadores habían tenido 
caminos paralelos en su ascenso en los rankings y se conocen muy bien. 
Fue un duelo de alta intensidad, con el español y el argentino peleando 
por algo no antes conseguido. Carreño confirmó su condición de favorito 
por ranking desde la solidez y la fortaleza mental. Y es que el español 
alcanza sus primeras semifinales de Grand Slam sin ceder un set.
"Ha sido increíble poder jugar en la Arthur Ashe ante un gran amigo 
como es Pablo”, dijo Schwartzman. “Creo que los dos primeros sets han 
sido muy apretados, han habido buenos puntos. Me voy a llevar muchas 
cosas positivas de este torneo”. 
Con dos breaks en cada set, Carreño se aseguró el control en el 
partido y terminó con sensacionales registros: 30 golpes ganadores y el 
dominio en todo tipo de peloteos. Tanto los intercambios de 0-4 golpes 
(59-44), como los rallies intermedios (19-16), como en intercambios que 
sobrepasaron los nueve golpes (19-12).
El curso 2017 ha sido un año en el que Carreño ha roto su techo mes 
tras mes. En febrero alcanzó su primera final ATP World Tour 500 en Río 
de Janeiro (p. ante Thiem); semanas después alcanzó sus primeras 
semifinales de ATP World Tour Masters 1000 en Indian Wells (p. ante 
Wawrinka); en la gira de tierra batida en Europa se coronó en Estoril 
(v. a Muller) y en Roland Garros firmó unos cuartos de final después de 
superar en cinco épicas mangas a Milos Raonic en la que fue su primera 
victoria ante un Top 10 en 17 intentos.
Sobre la posibilidad de disputar una hipotética final con Rafael 
Nadal, el asturiano no lo duda: "Sería fantástico pero aún queda lo más 
difícil".
Pero en Nueva York, Carreño ha tocado el cielo. Y con ello, sus 
opciones de clasificar para las Nitto ATP Finals se han multiplicado. 
Con las semifinales ya en el bolsillo, el español entra en la lucha 
directa por un puesto en el evento final de año.
ATP 
 

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