Ya no quedan palabras para describir a Rafael Nadal. Sólo hace falta ver sus logros. Con su victoria ante Stan Wawrinka, el español ganó su décimo Roland Garros y se convirtió en leyenda. A tal punto que las autoridades ya le informaron que le van a hacer una estatua.
El
español nunca perdió el ritmo del partido y siempre fue un dominador
claro. Estuvo perfecto en todos los tiros y siempre que fue exigido
respondió. La supremacia de Nadal surtió efecto en el suizo que parecía
abatido. El primer set fue 6-2 sin atenuantes.
El segundo parcial comenzó de la misma manera. Con un Nadal arrollador, fiel a su estilo en este torneo. Cabe destacar que el mallorquí nunca perdió un set en Paris y se puede decir que hizo un Roland Garros perfecto. El segundo set terminó con un 6-3 en favor del español.
Cabe destacar que Wawrinka venía de hacer un gran torneo. Su mejor
partido había sido en semifinales, en donde derrotó a Andy Murray en 5
sets, lo que le generó un gran desgaste físico. ¿Le afectó para jugar
contra Nadal? Seguramente, aunque eso no ensombrece el rendimiento del
español, que siempre fue más que su rival. Cada vez que el suizo trataba de salir adelante, Nadal contragolpeaba furioso. Así se fue el tercer y último set, en donde se vio toda la calidad de su tenis.
Con esta victoria, Nadal será el nuevo número 2 del mundo, mientras que Wawrinka ocupará el puesto número 3, relegando al cuarto lugar al serbio Novak Djokovic.
Este el décimo quinto Grand Slam que gana Nadal, superando nada mas y nada menos que a Pete Sampras. El líder de esta tabla es el suizo Roger Federer, que ganó 18.
TN.com.ar
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