En una nube. Albert Ramos Viñolas continuó alimentando su sueño en el Monte-Carlo Rolex Masters, firmando la primera clasificación de su carrera a las semifinales de un ATP Masters 1000. El español superó al cabeza de serie No. 8 Marin Cilic por 6-2, 6-7(5), 6-2 en dos horas y 32 minutos. Y es que el de Mataró no padeció la resaca propia de una gran victoria este jueves ante el número uno del mundo Andy Murray.
Sin la fortaleza del servicio, menos determinante que en cualquier otra superficie, en el inicio del partido los juegos se discutieron desde el fondo de la pista. Prácticamente sin puntos gratis. Había que trabajar, preparar y ganar cada intercambio. En ese contexto de dureza, Albert Ramos dio el primer zarpazo en forma de bola de break para escaparse 3-1.
El español, autoexigente y enfocado en cada uno de sus tiros, mantuvo una máxima: no permitir que su rival pegase dos golpes en la misma posición. Moviendo a Cilic de un lado a otro e intentado atraerlo a red, consiguió ampliar la ventaja con otro nuevo quiebre (5-2).
Con un 72% de puntos ganados con su servicio y sin conceder una sola opción de break al croata, Ramos acabó abrochando la primera manga en 39 minutos en su tercer set ball por 6-2.
En el inicio del segundo set, el español lució un 38% de acierto con el primer saque, permitiendo que Cilic pusieran en peligro uno de sus juegos con el servicio por primera vez, pero pudo escapar y salvar la opción de break para el croata (1-1). A Ramos le tocó resistir en cada servicio, después de que el balcánico diese un paso adelante al resto. Más agresivo e incisivo (3-3).
Sin embargo, fue el catalán el que logró hacer daño cuando peor parecía estarlo pasando. El tercer break convertido en su quinta oportunidad le sirvió para tomar el mando del set (4-3), que rápidamente confirmó con su saque (5-3). Pero Cilic no había dicho su última palabra. Cuando Ramos sacaba para cerrar el partido, el croata devolvió el break (5-5) y el partido se marchó a un intenso tie-break. A pesar de que Ramos se adelantó 5-3, el No. 8 del mundo le dio la vuelta (7-5).
Quedarse a sólo dos puntos de cerrar el encuentro pasó factura a Ramos. Tardó en recomponerse y por el camino se dejó un break ante un rival que había recuperado la confianza. Cilic pudo sentenciar con 2-0, 30-40, pero el español se aferró de nuevo al mismo guión que ante Murray un día antes. Punto a punto fue construyendo una nueva remontada hasta encadenar seis juegos seguidos (6-2).
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