Había soñado con este partido antes: el rival, el escenario y la eliminatoria. A sus 22 años, Lucas Pouille logró una de las victorias más prestigiosas de su joven carrera en el US Open ante Rafael Nadal por 6-1, 2-6, 6-4, 3-6, 7-6(6) para avanzar a los cuartos de final por segundo Grand Slam consecutivo.
El francés trabajó su cuarto triunfo de la temporada ante un rival clasificado en el Top 10 en cuatro horas y seis minutos para igualar su registro 4-4. Además de la victoria ante el No. 5 del Emirates Ranking ATP Rafael Nadal, también superó a David Ferrer en Roma y Miami, así como a Richard Gasquet en Montecarlo.
Con un estreno impecable en el US Open, Nadal se presentó en la cuarta ronda cediendo siete juegos o menos en cada uno de sus partidos para llegar hasta allí frente a Denis Istomin, Andreas Seppi y Andrey Kuznetsov. O lo que es lo mismo, apenas concedió una media de dos juegos por sets. Pero Pouille saltó a la pista con el objetivo de cuestionar el dominio incontestable de su rival a lo largo de esta edición en Nueva York. Y lo terminó logrando en un final dramático.
La primera decisión del francés fue arrebatarle la iniciativa desde el sorteo, eligiendo sacar él mismo. Pouille aprovechó un inicio frío, sin ritmo y con una serie de errores de Nadal para escaparse 3-0 en el marcador. Una doble falta del manacorense entregó el primer break del encuentro.
El jugador nacido hace 22 años en Grande-Synthe, que había confesado en la previa que admiraba a su rival en la tarde de este domingo, levantó un muro desde el fondo, devolviendo prácticamente cada golpe con potencia y colocación. Impecable. Así llegó un nuevo quiebre de Pouille (2/3, 1º set), que aprovechó el 0/6 de puntos con el segundo servicio de Nadal, para cerrar la primera manga (6-1) en apenas 28 minutos.
El manacorense apenas tardó en reaccionar ofreciendo la misma versión que en las tardes anteriores, con 14 golpes ganadores en un parcial donde sacó un catálogo de golpes de magia. Elevó su porcentaje de puntos ganados con el primer servicio hasta el 85% y transformó 2 de 4 oportunidades de quiebre para igualar el choque (6-2).
Un break prematuro fue suficiente para decantar el tercer set del lado de Pouille. En el primer juego se colocó 0-40 y no dejó pasar la oportunidad. A pesar de las alternativas para los restadores, ninguno volvería a conceder su servicio.
Y eso que Nadal salvó el juego más largo del partido hasta entonces con 6 deuces y otra bola de break en contra (2-1) para más tarde disfrutar de una opción de quiebre que salvó el galo. El No. 25 del mundo ató el 80% de los puntos con su primer saque en el set.
El encuentro entró en el terreno de las emociones y ahí es donde Nadal se hace más fuerte. Pouille veía más cerca que nunca la posibilidad de tocar los cuartos de final del US Open por primera vez; Nadal se negaba a marcharse antes de tiempo de Nueva York. De un break a otro, el español y el francés se fueron intercambiando ataques desde el resto. Después de tres roturas seguidas que dejó el marcador en 5-3, el cuarto cabeza de serie desató la derecha para mandar el partido a la quinta manga.
Con derecha y corazón, letal combinación desde el lado de Nadal, arrancó el set decisivo con otro break (5/11 en el partido), una ventaja que conservó hasta el 4-2. Aunque parecía fatigado y sin la misma frescura de piernas, Pouille volvió a engancharse al encuentro, devolviendo el break e igualando 4-4.
El partido se decidió en el tie-break, donde marcan los pequeños detalles. A cara o cruz. Y no fue hasta el cuarto punto del desempate cuando uno de los dos ganó su saque: Pouille. Precisamente el mismo que acabó firmando el triunfo (8-6) en la cuarta pelota de partido.
En cuartos de final, Pouille se enfrentará a su compatriota Gael Monfils que superó a Marcos Baghdatis en tres sets 6-3, 6-2, 6-3. El cabeza de serie No. 10 domina el FedEx ATP Head2Head por 1-0. El único precedente se remonta al Abierto de Australia 2015 que terminó en cinco mangas para Monfils.
ATP
No hay comentarios:
Publicar un comentario