Novak Djokovic, número uno del mundo, ya está en Flushing Meadows listo para retener su corona de campeón del US Open. En un cuadro que se le antoja apasionante, el serbio debutará ante el polaco Jerzy Janowicz, ex número 14 del mundo y semifinalista en Wimbledon 2013.
“La confianza está arriba, pues he tenido una gran consistencia y un nivel alto en los últimos dos años. Hasta el momento este curso ha sido fenomenal. Una de las mejores temporadas de mi carrera”, explicó ante los medios el doble campeón en Nueva York en 2011 (v. a Rafael Nadal) y 2015 (v. a Roger Federer).
Después de un verano en el que ha tenido que parar por unas molestias en la muñeca, Djokovic se aferra a su último triunfo como referencia para el torneo que empieza este lunes. “Después de la derrota de Wimbledon me costó un poquito centrarme de nuevo. Creo que en Toronto lo hice. Jugué bien y gané un torneo en el que no cedí un solo set”, recordó. Y es que en la ciudad canadiense, el de Belgrado logró su ATP World Tour Masters 1000 número 30, redondeando aún más un récord en su posesión.
Con doce Grand Slams en sus vitrinas, la posibilidad de acercarse aún más a Pete Sampras, Rafael Nadal (con 14) y Roger Federer (con 17) está presente en este US Open. “Para mí es un privilegio ser mencionado entre las leyendas de este deporte que han ganado más de diez Grand Slams, que han hecho historia. Es más, es un honor para mí jugar con dos de ellos, pues en los últimos diez años he jugado con Roger y Rafa”.
Pensando en el nuevo techo que lucirá la pista Arthur Ashe, Djokovic se mostró con muchas ganas de algunas gotitas de lluvia que ayuden a estrenar la cubierta. “Con el techo, será más lento y más húmedo por lo que para restadores es mejor”, apuntó antes de bromear: “Estaría muy contento si se jugara todo el torneo bajo techo, así hay más posibilidades de restar a grandes sacadores”.
Con el US Open cerrando el calendario de Grand Slams, Djokovic -que ha ganado los dos primeros del año en Australia (v. a Andy Murray) y Roland Garros (v. a Andy Murray)- sigue firme en la intención de añadir un tercero en su cuenta de 2016.
“Cada Grand Slam te pide un esfuerzo extremo. Los últimos tres están muy cerca en el calendario y piden mucha intensidad y siendo el US Open el último, debes dar lo mejor porque es el último del año, aquél en el que tienes que estar en tu plenitud. Dar lo que te quede en la reserva”.
ATP
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