Alemania partía como víctima hoy en Nancy frente a una poderosísima Francia. Los galos lo tenían todo de cara, ventaja en el ranking, el apoyo de su público, su superficie favorita... todo hacía presagiar una fiesta local. Pero la jornada no pudo estar más alejada del guión establecido.
Primero fue el turno de Tobias Kamke, 96 del mundo, que literalmente arrolló a Julien Benneteau, 50 del ranking mundial, para asombro del público local con un marcador final de 76(8) 63 62.
El pánico no cundía todvía en la parroquia gala porque en el segundo partido tenían a su gran baza, Jo Wilfried Tsonga que además se medía a un rival desconocido fuera del Top 100 de la ATP. El nombre del alemán, Peter Gojowczyck, no le decía nada a nadie. Pero ahora a muchos les costará olvidarlo.
El alemán jugó todo el partido de tú a tú al mismísimo Tsonga como si de un Top 10 se tratase y finalmente, en el quinto set, cuando la sangre fría es la cualidad más valiosa, sacó a relucir su mejor tenis y una resistencia física envidiable para derrotar a la gran estrella local por 5-7 76(3) 36 76(8) 8-6.
Francia no puede permitirse ni una sola derrota más si quiere estar presente en las semifinales.
Por Clive White
Daviscup.com
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