Del Potro conquistó el 79% de los puntos con su primer servicio e impactó siete aces, aunque sufrió quiebres en momentos clave y cedió su primer set en el torneo. De todas formas, mostró su oficio en el tercer parcial y se abrió paso a su sexta final de 2013 y tercera consecutiva, tras el título en Tokio y la caída con Novak Djokovic en Shanghai.
Ante Roger-Vasselin, el argentino tomó la iniciativa de arranque, quebrando al francés en su primer juego de saque. Un break del galo en el sexto game, para igualar las cosas 3-3, parecía reabrir el destino del set, pero el tandilense volvió a quedarse con el saque de su rival en el juego siguiente y con ese margen se llevó el capítulo inicial.
En la segunda manga, llegaron igualados a ese mismo séptimo game y la historia se repitió: quiebre de Del Potro y ventaja de 4-3. Pero aquí el francés reaccionó, recuperó el break de inmediato y ganó tres games en fila para transformar lo que era camino llano para Del Potro rumbo a la final en una instancia mano a mano.
De cualquier manera, la oportunidad perdida no le pasó factura a Del Potro. El argentino respondió con autoridad en el set decisivo y en una ráfaga quebró dos veces a su rival para adelantarse por 4-0 y solventar una diferencia que Roger-Vasselin ya no podría disminuir.
Así, Del Potro continúa sumando logros a su gran cierre de 2013, que, a la expectativa de lo que haga en París y Londres, podría verlo escalar hasta el N°4 del mundo, en vistas de la inactividad (y consecuente pérdida de puntos) de Andy Murray. Por lo pronto, el tandilense disputará su 24ª final en el circuito, igualando a David Nalbandian como el tercer argentino con más definiciones ATP. Solo los superan José Luis Clerc, con 35, y Guillermo Vilas, que disputó 104.
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