El serbio Novak Djokovic y el bronce olímpico, el argentino Juan Martín del Potro, jugarán mañana sábado una de las semifinales del Másters 1000 de Cincinnati con aires de revancha, justo una semana antes del arranque del Abierto de tenis de Estados Unidos.
Djokovic, segundo sembrado (N.2) y campeón defensor del US Open, necesitó este viernes de sólo 80 minutos para despachar al croata Marin Cilic por 6-3, 6-2.
'Delpo', cabeza de serie N.6, selló su séptimo pasaje a semis en nueve visitas al Másters 1000 tras superar 6-1, 6-3 al francés Jeremy Chardy, un 'matagigantes' que venía de eliminar en tercera ronda al campeón olímpico, el escocés Andy Murray.
Djokovic ha ganado cuatro de seis partidos ante el argentino, pero éste le ha vencido en los últimos dos enfrentamientos, la Copa Davis de septiembre y la disputa por la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Londres-2012, espinas que el serbio trata de hacer ver como que no le duelen.
"El partido contra Del Potro no será por revancha. Esto es deporte. Uno gana y pierde. El está jugando con mucha confianza y será un reto jugar contra él", declaró Djokovic.
Djokovic viene impulsado después de ganar el Masters 1000 de Toronto la semana pasada, un triunfo importante a las puertas de la defensa de su título en el Abierto de Estados Unidos, que arranca la semana próxima.
Frente a Cilic, demostró su poderío en canchas rápidas para ganarle por séptima vez consecutiva, cediendo un sólo set de los 17 sets jugados en topes entre ambos.
"Fue un partido muy bueno, mi mejor partido en el torneo", apuntó Djokovic. "Estoy en buena forma. Puede que haya crecido en tierra batida, pero he logrado los mejores resultados de carrera en canchas duras".
Del Potro, de su lado, viene jugando a una gran altura, pese a dolores en la muñeca izquierda.
El argentino hará un alto en su preparación para el US Open para revisarse la zona dañada por los doctores de la Clínica Mayo en Cincinnati, los mismos que le operaron de la muñeca derecha en el 2010.
Del Potro terminó el sueño del francés Chardy (38º ATP), quien venció la semana pasada en el Másters de Toronto al medallista de plata en dobles, su compatriota Jo-Wilfried Tsonga, y eliminó a Murray en Cincinnati.
"Le rompí el servicio muy temprano, así que eso me dio confianza para jugar relajado y no pensar en mi muñeca", dijo Del Potro.
"Estoy en un buen nivel en este momento después de los Juegos Olímpicos. Puedo jugar con confianza ante cualquiera", apuntó el tandilense, quien buscará la semana próxima en Nueva York repetir su título del US Open de 2009.
No hay comentarios:
Publicar un comentario