Fue niña prodigio, número uno del mundo, campeona de cinco Grand Slams individuales y nueve en la modalidad de dobles. A sus 34 años, Martina Hingis compite como doblista sin la presión que siempre la acompañó en su carrera individual. Tras formar pareja con Daniela Hantuchova, Sabine Lisicki y Vera Zvonareva en el último año, Hingis estuvo a un paso de disputar el torneo de maestras junto a Flavia Pennetta. Ambas ganaron los torneos de Moscú y Wuhan, además de alcanzar la final en el US Open.
En una reciente entrevista a Times of India, Hingis valora los éxitos individuales conseguidos durante su carrera: “Creo que tuve oportunidades para ganar, quizá, otros dos Grand Slams. En todos esos partidos hubo grandes rivalidades con las hermanas Williams, con Jennifer Capriati en Australia y con Steffi Graff en Roland Garros. Creo que en mi momento tuve oportunidades. Pude ganar unos partidos, perder otros, pero en conjunto, no lamento nada y estoy orgullosa de lo que hice en mi carrera. Tengo muchos grandes recuerdos, pero creo que jugar contra Venus o Serena era maravilloso. Siempre sacábamos lo mejor la una de la otra”.
Hingis tuvo a Serena Williams, una tenista de su generación, como una de sus grandes rivales: “Serena es la número 1 del mundo y ha estado allí muchos años. Es increíble. Creo que el tenis basado en la potencia ya se vio con las hermanas Williams cuando jugamos entre nosotras, pero no creo que otras como Mary Pierce, Jennifer Capriati y Monica Seles golpearan más flojo. No es muy diferente a lo que se hace hoy. Los materiales han cambiado, el juego es más físico, pero en general, no diría que el tenis se ha vuelto más inteligente”.
Preguntada por el secreto del éxito de Serena, Hingis lo tiene claro: “Su saque. Es increíble, el mejor del mundo. Es muy sencillo y eficaz. Es su mejor golpe y el que la mantiene en lo más alto.
La tenista suiza también recuerda los momentos difíciles que vivió por las lesiones: “Tuve el apoyo de mi equipo y mi madre siempre estuvo ahí. No es una cuestión de tenis, sino de que tu cuerpo se recupere. Después de algunas lesiones como las que tuve, una tiene que aprender a andar otra vez. Está claro que no es un período agradable, pero tienes que intentar superarlo y rendir a tu mejor nivel otra vez”.
“Disfruto mucho con los dobles. Me empezaron a gustar poco a poco, pero ahora me encantan. Me daba la sensación de que aún estaba lista para jugar, no tienes que cubrir toda la pista. Los partidos individuales son demasiado físicos, tienes más espacio para jugar pero también más espacio que cubrir. Los dobles son más rápidos. Cuentan las reacciones, por las que siempre he sido conocida”, comenta Hingis.
Por último, la tenista suiza espera competir en los dobles mixtos del Open de Australia 2015 con Leander Paes: “Competimos como pareja un par de años. Espero que juguemos juntos el Open de Australia. Lo hablamos en el US Open, pero no hemos mantenido el contacto, ojalá mantenga su palabra”.
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